Las emergencias pueden ocurrir en cualquier momento, y saber cómo reaccionar es clave para salvar la vida de tu mascota. Mantén siempre un botiquín de primeros auxilios con los siguientes elementos esenciales: gasas, vendas, solución salina, termómetro, guantes desechables y números de emergencia de veterinarios cercanos.
Situaciones comunes y qué hacer:
- Envenenamiento: Si sospechas que ha ingerido algo tóxico, evita que coma o beba más. Algunos signos de envenenamiento incluyen vómitos, diarrea, babeo excesivo y convulsiones. Lleva inmediatamente a tu mascota al veterinario.
- Heridas o cortes: Limpia la zona con agua tibia y aplica un vendaje limpio. Si el sangrado es abundante, presiona con una gasa hasta llegar al veterinario.
- Golpes de calor: Si jadea en exceso, está letárgico o su lengua se torna azulada, dale agua fresca y humedece sus patas y abdomen con un paño húmedo. Llévalo a un lugar fresco y contacta a un veterinario.
- Fracturas o esguinces: Evita mover a tu mascota innecesariamente y transporta con cuidado al veterinario en una superficie firme.